Watsu sin Fronteras
Resultados de los principios físicos del agua en la aplicación del Watsu
La flotación es uno de los principios más importantes en los trabajos de relajación en el agua, siendo el principio que difiere el trabajo acuático de los trabajos corporales en suelo. Solamente en el espacio podríamos tener la sensación de (ausencia de gravedad” y con ella llegar niveles relajación profunda cuando son bien dirigidas.
La presión hidrostática proporciona algunas facilidades para el retorno venoso, ya que la presión provoca un efecto de presión periférica actuando como una media de compresión. Esto proporciona una facilidad para el intercambio de gas en el torrente sanguíneo. Principalmente para la absorción de O2. La presión aumentada en el tórax dificulta la expansión de la caja torácica. Esa misma presión en el tórax puede ser aprovechada para trabajar los músculos de la respiración, aumentando la capacidad respiratoria.
En las embarazadas, ayuda al retorno venoso y disminuye los edemas linfáticos. En personas de 3º edad con tendencia a las várices y también edemas.
Relajación muscular. Con la gravedad contrabalanceada (por la acción del empuje), nuestros músculos se liberan de su trabajo continuo de mantenernos de pie y tienen la posibilidad de estar completamente relajados. Nuestra musculatura postural que está siempre activa, en este momento, estando sobre la acción de gravedad atenuada, se puede disminuir el tono y relajar con más intensidad que cuando está en decúbito.
Disminución del tono muscular. De acuerdo con James McMilan, que desarrolló el método Halliwick, el tono es influenciado por el masaje dado por la energía propioceptiva estimulada por la gravedad. En otras palabras, el tono está ligado a la función del peso. Después que los efectos del peso (fuerza de gravedad) fueron neutralizados por los 15 minutos de inmersión, el tono de una persona disminuye automáticamente. Este cambio de tono llega a durar hasta una hora y media después de dejar la piscina.
Descompresión de la articulación. Mientras que los músculos estén relajados y las articulaciones están aliviadas de la carga de peso, estas últimas se descomprimen. El movimiento es más libre y menos doloroso. La necesidad de protección y tensión disminuye. El agua simula la ausencia de la gravedad, disminuyendo la compresión en las articulaciones dolorosas.
Sensación de liviandad. El cliente percibe que el terapeuta lo apoya movilizándolo fácilmente y siente la liviandad. Normalmente es una experiencia positiva. Asociada, a veces, a la infancia.
Exigencias de oxígeno reducidas. Dr. Tcharkovsky, pionero soviético en investigaciones sobre los nacimientos en el agua, estableció que en el estado de liviandad que se logra dentro del agua hace que las exigencias de oxígeno del cuerpo disminuyen drásticamente, posibilitando la aceleración del crecimiento de los bebés prematuros. Si lo relacionamos con el Watsu, existe una tendencia de disminución de la tasa respiratoria, aumentando la inducción a un estado de calma y meditación.
El calor del tejido conjuntivo blando antes de la elongación aumentará extensibilidad del tejido acortado. Los músculos se relajan y se elongan más fácilmente, esto hace que la elongación sea más confortable para el paciente. A medida que aumenta la temperatura intramuscular el tejido conectivo cede con más facilidad con la elongación pasiva y la sensibilidad de los OTGs (Órgano Tendinoso de Golgi) aumenta, haciendo posible la inhibición muscular. El calentamiento también disminuye la posibilidad de microtraumas en los tejidos blandos durante el estiramiento y, de este modo, se puede disminuir el dolor muscular tardío producido luego de los ejercicios.
El Órgano Tendinoso de Golgi (OTG) es la estructura que une los músculos a los huesos y tendones. Su característica elástica permite que el músculo sea estirado hasta cierto punto sin que éste se lesione. A medida que estiramos la musculatura, el OTG se va adaptando a la “nueva” situación del músculo, permitiendo este estiramiento. Un método de elongación en donde se puede verificar el funcionamiento del OTG es la elongación de 3s, donde a partir de un ángulo dado como límite, podemos verificar que la musculatura se adapta después de un tiempo permitiendo un mayor ángulo.
La Relajación provoca una disminución en el consumo de oxígeno de los músculos esqueléticos y un aumento de la compliance de la pared torácica. “…se respira más superficial y se aumenta la tensión de los músculos accesorios. Acontecimiento que generalmente acompaña un estado de miedo…”.
Sin embargo ese no sea aparentemente alcanzado y experimentado nuevamente por el Watsu, es de suponer un miedo elevado y una consecuente desconfianza puedan sobrevenir de una mala toma de la cabeza, principalmente tardía, en una sesión en la cual se llega a un nivel más profundo de vulnerabilidad. (Moshe Feldenkrais, fundador del método Feldenkrais, dice que el reflejo de sobresalto es mecánico, generando un avance en la desalineación postural y perturbaciones en la respiración).
La posición horizontal del cuerpo es para el descanso, receptividad, relajación de la musculatura y circulación equilibrada, es una posición en la cual estamos libres para iniciar un viaje interior. La posición horizontal favorece al ser, en cambio la vertical es para hacer.
Cuando el compañero siente su toque por primera vez y experiencia su apoyo y sensibilidad con la cual usted sigue la respiración, su credibilidad queda establecida, abriendo el camino para una mayor relajación.
- Una transición sucede de una auto-responsabilidad e independencia para una dependencia en relación con el otro. Este es un viaje de retorno y lleva tiempo.
- Con respecto a la relajación en el agua: “Una de las primeras teorías de McMillan (el creador del método Halliwick), sugiere que el agua tibia no es del todo la responsable por la disminución del ton muscular observado en los clientes de rehabilitación acuática. Esta noción fue apoyada por la investigación aeroespacial. En cambio, el tono está influenciado por la energía propioceptiva, estimulada por la fuerza de gravedad. En otras palabras, el tono es una función de peso. Cuando una persona está inmersa en el agua por encima del nivel de T11 (vértebra torácica 11), o queda en el agua en posición horizontal, la fuerza de gravedad está neutralizada. Los sistemas táctiles sensoriales son utilizados para monitorear la posición del cuerpo y del movimiento. Después que los efectos del peso (fuerza de gravedad), sean neutralizados en 15 minutos de inmersión, el tono de una persona disminuye automáticamente. Este cambio de tono también puede ser percibido hasta una hora y media después de dejar la piscina”.
- De las doce vértebras torácicas hasta las caderas, existe una cadena de articulaciones interconectadas, en la cual, la compensación a través de la pelvis y de la columna lumbar facilita los movimientos de la pierna en todas las direcciones. Los ligamentos fuertes que atraviesan la parte frontal de la pelvis exigen que apoyemos debajo del sacro, con recelo de que el peso de las piernas incline la pelvis hacia delante hiperextendiendo la parte inferior de la columna. Mismo siendo apoyados sobre el sacro, los clientes tienden a proteger la parte inferior de la espalda contrayendo los músculos abdominales.
- Las articulaciones intervertebrales y los músculos de la columna se apoyan normalmente y se estabilizan dentro del campo de gravedad. Durante los movimientos de onda, en el estado de flotación pasiva, los propioceptores en estas estructuras envían al cerebro un mensaje diferente, “Yo soy flexible”.
- La descompresión de la articulación ocurre por todo el cuerpo por la menor presencia de gravedad y la reducción de la contracción muscular. Los mensajes que el cerebro recibe a través de los propioceptores cuando la columna es ondulada son, virtualmente, afirmaciones. La mente aprende: “Yo soy libre”.